diumenge, 5 de desembre del 2010

Fugas............ de información


Wikileaks (Wikifugas) se ha convertido en la bestia negra de las cancillerías de medio mundo. La razón es muy simple, poner al descubierto las prácticas de las diplomacias. Se quiere atacar al mensajero para dejar intacto las prácticas de los gobiernos y sus estrategias geopolíticas. Naturalmente, como en las novela de John Le Carre, han aparecido denuncias: "La Policía Internacional (Interpol) ha emitido hoy una orden de detención de categoría roja (de máxima prioridad) contra el fundador de Wikileaks, Julian Assange, ante la petición cursada por la Justicia sueca que le acusa de los delitos de violación, abusos sexuales y coacción. La orden permite que Assange pueda ser detenido en cualquiera de los 188 países miembros de Interpol y aceleraría su extradición a Suecia" (El País, Domingo, 5/12/2010, 12:57 h).

Seguramente en la novela de Le Carre podría haber sido acusado de pederastia que siempre es más llamativo. No sé si tiene fundamento o no lo tiene. El propio denunciado y alma de Wikileaks, Julian Assange tendrá que aclararlo. Lo que parece evidente es que hay un movimiento gubernamental para silenciar las filtraciones que ponen al desnudo las prácticas de nuestro gobiernos. Desde amenazas hasta el intento de silenciarlos por la vía de cerrar los servidores, por ejemplo, de Amazon y Paypal recientísimamente.


Un coro de voces también clama por el "desaguisado" de Wikileaks. Unos afirman que lo que han sacado a la luz "Cablegate" era algo que ya se sabía de forma implícita y que por tanto, nada aporta a la comprensión de la política exterior de los estados afectados. Otros, denuncian la parcialidad de las "supuestas" revelaciones. Si las revelaciones no fuera verosímiles, no se hubieran empleado a fondo como lo están intentando silenciar. Se nos dicen que son "notas" de los diplomáticos y que no tienen valor "jurídico", sino que son impresiones o sugerencias que se hacen en el calor de las entrevistas que realizan. Otros, aseguran que mientras no aparezcan informes sobre el mundo financiero, no tendrán credibilidad. Vivimos una etapa postmoderna. Si esto hubiera sucedido en la etapa de la guerra fría, un coro de voces angelicales nos anunciarían que son filtraciones del enemigo. Pero la guerra fría ha acabado, ahora hay otras cosas, por ejemplo, sigue la guerra contra el terrorismo.

La propia organización de Wikileks ha anunciado la próxima filtraciones hará referencia a un importante banco estadounidense. Debe haber histeria en los bancos ante la posibilidad de una filtración sobre un terreno donde el secretismo y la opacidad han sido una de las señas de identidad del sistema financiero global. No hay más que referirse a ese "ente" denominado "movimientos especulativos", donde no se permite visualizar quien hay detrás de esos movimientos. Los ataques a Grecia, Irlanda, Portugal y España tienen que ver con esos grupos.

En sociedades democráticas, nuestros gobiernos juegan juegos que no siempre son muy claros. El cuarto poder, la prensa, los medios de comunicación, tienen como función denunciar los abusos y tropelías de los gobiernos. Otra cosa es como se consiguen esos "informes". Hay leyes para depurar responsabilidades. Que El País publique esos informes es que tienen cierto grado de veracidad y ayudan a respaldar a Wikileaks. Si fuesen documentos sin interés ni versímiles no se publicarían. Si no existiese este tipo de organizaciones como Wikileaks debería inventarse.

dissabte, 6 de novembre del 2010

El futuro imperfecto (I)

El futuro y sus enemigo. Una defensa de la esperanza política, es el último libro de Daniel Innerarity que se ha publicado en Paidós. El libro es un intento de abordar algo tan elusivo como es el futuro. Formalmente contiene una introducción y ocho capítulos. Sin pretensión de reproducir el texto, si quisiera seguir el hilo que Innerarity  dibuja en un territorio inexplorado e imprevisible.

Introducción. El futuro tomado en serio

Se parte de un hecho innegable en el ámbito antropológico, a saber, el ser humano es el único animal que es consciente de la existencia del futuro. Lo característico del futuro es precisamente su incerteza.

Denuncia el autor que nuestras sociedades están abrazadas "al presente inmediato" y que nuestra actitud frente al mañana es de "precaución e improvisación" y no de "esperanza y proyecto".

Su objetivo es contribuir a una "nueva teoría del tiempo social". Conecta la crisis de la política y un futuro incierto, se trataría recordando a M.Weber de gestionar el futuro y responsabilizarse de él. En eso consistía la política.

Afirma que "la tarea principal de la política democrática es la de establecer la mediación entre la herencia del pasado, las prioridades del presente y los desafíos del futuro". Nos dice que vivimos en la lógica del just in time y eso afecta a la lógica de los mercados y su tiempo vital que se agota en el corto plazo, los medios de comunicación y su lógica del especáctulo y la democracia que vive en los ciclos electorales.


Este presentismo o "miopía temporal" afecta a nuestra capacidad de proyectarnos hacia el futuro, "vivimos conforme a una lógica de la supervivencia y no de la esperanza". Si la política vive en esa miopía parece que el futuro ha sido colonizado por "las promesas tecnológicas o de las revisiones de crecimiento económico".

Señala quienes son los enemigos del futuro. Estos enemigos aparecen disfrazados de diferentes maneras: aquellos que quieren "neutralizar a toda costa su carácter abierto e imprevisible"; los que "lo conciben sin tomarse en serio su complejidad; "quienes lo planifican sin respetar su intransparencia"; quienes simplemente esperan su llegada como un "supuesto movimiento natural de las cosas".

Afirma la necesidad de una política que mire al futuro como su tarea fundamental, evitando "la acción se convierta en reacción insignificante" y  que "el proyecto se degrade a idealismo utópico. Es decir, hay que evitar que nuestras acciones sean reactivas, es la política actual, simplemente se actúa cuando no hay más remedio, podemos encontrarnos que nuestras acciones sean insuficientes e ineficaces, también hemos de evitar que el futuro se proyecte sin posibilidad de realizarlo. Desgraciadamente, la historia nos ha enseñado a nuestra costa los desastres que conllevan esas utopías que se degradan en totalitarismos.

dissabte, 23 d’octubre del 2010

Tiempos difíciles: La novela de la Guerra Civil

“La noche de los tiempos” es la última novela de Antonio Muñoz Molina. La novela es muchas cosas, para empezar, una novela soberbia. Una historia intensa y extensa. Unos personajes que se muestran como son a lo largo de la historia. Una historia que nos refleja como españoles. El inicio de la guerra civil. Es la historia de un adulterio, pero también una historia de amor y desamor, de odios y mezquindades, de actos generosos y heroicos.

La intensidad del lenguaje impresiona. Cada palabra parece que está buscada para ser esa palabra y no otra la que tiene que estar ahí. Los personajes y sus circunstancias marcan sus destinos. La novela no es un panfleto político. Hay descripciones de los protagonistas históricos, especialmente, la figura de Juan Negrín que murió en el exilio.



La historia es simple, no como está estructurada y escrita, el protagonista de la historia es Ignacio Abel arquitecto, se enamora de Judith Biely, norteamericana que lo conoce en una charla sobre arquitectura popular en la Residencia de Estudiantes. La mujer de Ignacio Abel es Adela una mujer que cumple con el papel asignado a una condición subalterna, propia de la época. Adela descubrirá la infidelidad. Adela e Ignacio Abel tienen dos hijos, Lita y Miguel.

El proyecto de Ignacio Abel se llama “Ciudad Universitaria”, la aparición de Judith trastorna completamente la vida de Ignacio Abel. Éste había huido a Alemania para ampliar estudios, dejando a Adela al cuidado de su hijo pequeño. Allí tuvo una aventura. No esperaba volver a encontrar el amor y el deseo a estas alturas de su vida acomodada a la rutina.



Las circunstancias van creando las condiciones que acabarán por imponerse a todos. La guerra se va imponiendo lentamente, casi filtrándose en las vidas de todos los ciudadanos de Madrid. Ignacio Abel ajeno a los acontecimientos que tiene delante sólo piensa en su amor ciego y culpable.

Hay un recuerdo que aparece a lo largo de la novela una frase que taladra la memoria de Ignacio Abel: “ Ignacio, por lo que más quieras, ábreme, no dejes que me maten”. La trama de esa frase y el porque de lo que sucede es uno de los cabo bien atados de la novela.

Abel habla con Negrín sobre la situación y éste le dice: “bastarán dos generaciones para mejorar la raza, y nada de eugenesia, ni de planes quinquenales. Reforma agraria y alimentación saludable. Leche fresca, pan blanco, naranjas, agua corriente, ropa interior limpia; si nos dejaran tiempo, los otros y los nuestros...”(pág.585). He aquí sin duda un plan auténticamente revolucionario.

Negrín insiste: “ [hablando de los políticos]. Y para poner en práctica su delirio particular cada partido y cada sindicato lo primero que ha hecho ha sido inventarse su propia policía, sus propias cárceles y sus propios verdugos. Pero me niego a creer que todo esté perdido” (pág.704). Abel no es que se haya rendido es que simplemente aún no sabe lo que está pasando. El destino le tiene preparada una carta. La posibilidad de ir a EE.UU para construir un edificio en una universidad americana. Negrín se quedará, mientras que Ignacio Abel deja a su familia en la Sierra, no sabe si está en zona republicano o ha caído en el otro bando. No lo sabe, y no quiere saberlo, porque lo único que busca desesperadamente es a Judith. Finalmente, Abel llega a su destino....

Tengo la secreta convicción que una segunda parte de la novela no sería nada descabellado. El arte literario que derrocha Muñoz Molina es impresionante. Pocas novelas provocan el sentimiento de estar delante de una obra total. No es una novela de historia, pero retrata perfiles grises de una época que aspiraba a otra cosa de lo que acabo sucediendo. Ese legado envenenado del que aún cuesta desprenderse. Esta novela no es moralistas, no marca quienes son buenos y malos, los muestra como son, y al hacerlo, los deja sin coartadas de ningún tipo. Somos los lectores quienes podemos redimirlos o condenarlos, pero eso ya no es asunto del escritor.

diumenge, 10 d’octubre del 2010

La famlia Kim


Erase una vez un país pequeño rodeados de gigantes y un país hermano que quiere su ruina. Todos los ojos están mirando a ese país heroico que es la patria de los felices trabajadores. El mundo conspira para desbaratar su utopía que se ha creado con tantos esfuerzos y sacrificios.

Todo empezó de mala manera. La invasión japonesa, primero, después la división entre el norte y el sur y su adscripción a las órbitas de EE.UU y la Unión soviética como consecuencia del reparto después de la Segunda Guerra Mundial, hizo emerger al líder Kim Il-sung que gobernaría con maestría suprema desde 1948 hasta su muerte en 1994.  Sin embargo, La división de la península de Corea se estableció de forma artificial mediante la división por el paralelo 38. Las tensiones y provocaciones hicieron que el heroico gobierno de Kim tuviese que emprender medidas de castigo contra la pérfida Corea del Sur, un bastión de la plutocracia capitalista. Se inicia el 25 de junio de 1950 la Guerra de Corea. La guerra duró tres largos años. Los excepcionales dotes de Kim hizo que los estadounidenses salieran  derrotados y se estableciera mediante los buenos oficios de la ONU un armisticio y la creación de una zona desmilitarizada entre ambos países.



Desafortunadamente, el piloto y navegante Kim Il-sung, una bendición de los cielos murió. El partido de los trabajadores en un Congreso sublime dio el cargo para suceder al único e inimitable Kim, otro Kim su hijo que llevará a cabo lo empezado por Kim padre. Así, Corea del Norte, se ha convertido en la primera república popular que trasfiere el poder vía dinástica. La prensa occidental, envidiosa de los logros excepciones de Corea del Norte ha difamado y calumniado con noticias falsas, como que entre 1995-1998 el país sufriera una hambruna que según The Econimist llevó a la muerte entre seiscientos mil a un millón de personas, según estimaciones conservadoras. Además, se insinuó que el gobierno legítimo del pueblo rechazó la ayuda ofrecida por occidente. Ahora, Corea del Norte, vuelve a estar en primera página, no porque se anuncien que tiene la bomba atómica, sino porque una vez más, la envidia corroe a los enemigos del pueblo elegido por el destino: Corea del Norte. El sagaz Kim Jong-il ha propuesto a su hijo Kim Jong-un como legítimo sucesor para dirigir los destino del país.

dissabte, 9 d’octubre del 2010

Premios nobles



La Academia sueca ha concedido a Mario Vargas LLosa el nobel de Literatura. ¡Ya era hora! Con una trayectoria extensa e intensa, por fin se le ha reconocido su capacidad para inventar y reinventar la realidad a través de sus novelas. En mi caso particular, la lectura de su novela "La guerra del fin del mundo", supuso un extraordinario impacto literario. Es una historia total sobre la lucha por la supervivencia, por la libertad, por la amistad. A partir de ese momento reconocí a un escritor de primera categoría. Después, las siguientes novelas, vinieron a confirmar esa honda impresión que me causó "La guerra....". Novelas como "La tía Julia y el escribidor", "Lituma en los Andes", "La fiesta del chivo", "Travesuras de la niña mala", son novelas que confirman su capacidad para fabular y describir situaciones límite. Junto a su vertiente literaria no puede obviarse su faceta de polemista y político. Su ensayos y artículos periodísticos avalan una trayectoria que tiene como eje central la libertad. Curiosamente, una parte de la "izquierda" mira por encima del hombro al galardonado por sus "veleidades" liberales. Sin embargo si alguien lee, por ejemplo, "El lenguaje de la pasión"  se dará cuenta que encorsetarlo en un rotulo es tarea inútil. Vargas Llosa se le reprocha su liberalismo político. ¿Acaso alguien hace algo diferente en los tiempos que corren?






El premio nobel de la paz que se concede en Noruega se le ha otorgado este año el premio al activista pro derechos humanos Liu Xiaobo. El gobierno chino ha desplegado sus largos brazos propagandísticos para minimizar el impacto. Llama la atención el silencio vergonzante de los paladines de los derechos humanos. Sólo cuando el gobierno estadounidense se ha felicitado por el galardón, lo demás países han podido respirar tranquilos. España ha hecho el papelón que le corresponde dada su situación. El gobierno español ha intentado que China compre deuda española, y ha debido pensar que no era un buen momento para criticar la política dictatorial china, y a su vez, pedir apoyo financiero. China es el paraíso del capitalismo. La razón es bien sencilla, allí gobierna una dictadura que controla todos los resortes de la vida política y económica. Resulta llamativo que un estado que ha logrado convertirse en la segunda potencia del mundo, sea incapaz de resistir la crítica que desde sectores sociales lanzan contra las políticas del gobierno chino. Su intolerancia expresa su condición totalitaria. Su control de los medios, su capacidad para reprimir cualquier atisbo de descontento, y  un régimen penal desorbitado, hacen de China un gigante que es incapaz de gestionar la crítica. La inexistencia de oposición -Lius Xiaobo cumple condena de 11 años por su activismo político- hace extraordinariamente difícil la creación de una oposición al régimen. Los beneficios económicos, la mano de obra barata y dócil, hacen de China el paraíso de la globalización. Histerismo gubernamental chino y nervios en las cancillerías de los países que dan lecciones de democracia y derechos humanos. Es evidente que si importa el tamaño. Somos serviciales con los gigantes y mezquinos con los pequeños. Cuba, Corea del Norte o Irán,  deben de ver con envidia como  los chinos pueden saltarse los derechos humanos, mientras que ellos deben soportar las airadas descalificaciones de los mismos que ahora están mudos. A todo esto, muy probablemente, Liu Xiaobo, aún no sepa que ha recibido el premio nobel de la paz. 

dilluns, 4 d’octubre del 2010

Palabras vs Imagen


Un tópico recorre alegremente nuestras creencias: una imagen vale más que mil palabras. Sin embargo, la imagen siempre es muda, desnuda. Muestra, pero no dice. Por eso es ambigua. Puede ser utilizada con fines difusos. La imagen congela nuestra imaginación imponiendo lo que hemos de imaginar. Mientras que las palabras dejan a la imaginación la opción de recrear imaginariamente lo que nos dice la escritura. La escritura requiere un lector para cerrar el círculo entre el escritor y el lector.



La palabra

El arco invertido de los cables atraviesa de una orilla a otra con la exacta delicadeza de una curva de compás trazada en tinta azul sobre la cartulina blanca. No hay revestimientos de piedra para esconder o ennoblecer la estructura: la luz traspasar las torres como las filigranas geométricas de una celosía. Las torres desnuda, puros prismas de acero, su verticalidad tan firme como la horizontal ligeramente combata que se extiende sin más soporte que ellas entre las dos orillas, los cables como arcos y como dobles cuerdas de arpas vibrando con el viento. Pureza matemática: dos líneas verticales atravesadas por una horizontal, un arco inverso de aproximadamente treinta grados que tiene sus extremos en los puntos de intersección de la horizontal y las verticales. (…) Poco a poco, al acercarse el tren, la ligereza se convierte en peso, en la gravitación tremenda de las vigas de acero sobre los pilares ciclópeo que las sostienen, hundidos en la roca viva por debajo del cauce del río y del cieno, sus bloques graníticos golpeados por las olas que levanta un carguero pasar bajo el puente, adelantado en seguida por tren. ( Antonio Muñoz Molina. La noche de los tiempos. Ed.Círculo de Lectores. pág.162)




La imagen






diumenge, 12 de setembre del 2010

La importancia de llamarse Jones



Terry Jones ha logrado que su nombre aparezca en todos los medios de comunicación el mundo. ¿Quién es ese Jones? La respuesta es un freaky. Un personaje de una oscura iglesia inventada por él en nombre de Dios. En su cuartel general en del Centro Cristiano Fundamentalista de Gainesville (Florida)  anunció a sus 50 fieles que quemaría el Corán como desagravio ante lo ocurrido el 11-S de 2001. 

La iglesia de Jones  llamada "The Dove World Outreach Center" es un ejemplo de la libertad religiosa en EE.UU. Cualquier iluminado puede abrir un centro para adorar a dios. Se requieren fieles que paguen "religiosamente" las cuotas para su mantenimiento. Jones vivió en Colonia (Alemania) donde fundó una secta. Se le involucro en escándalos financieros y de otro tipo y acabó refugiándose otra vez en EE.UU.


La importancia de llamarse Jones es que este apellido va asociado a otro famoso iluminado llamado Jim Jones que el 17 de noviembre de 1978 llevó a la muerte a todos sus seguidores en Jonestown -la ciudad Jones- (Guayana) alrededor de 913 personas murieron en combinación con veneno y balas. Fue considerado primero como un suicidio colectivo, pero posteriormente las pruebas demostraron que se asesinó a muchos de ellos que no querían transitar al otro mundo por las buenas y acabaron por las malas.

Y ahora otro Jones vuelve a ser protagonista. Los medios de comunicación han amplificado hasta el paroxismo las ideas de Jones. Quemar coranes como biblias debería ser un asunto que no ocupase ningún espacio en los medios. Pero en pleno siglo XXI la religión ha ocupado un espacio que parecía fuera de lugar en el siglo XX. Los hechos del 11-S y la irrupción del fundamentalismo islámico de la mano de Al Qaeda (La Base) ha alterado el panorama. La religión ocupa un espacio cada vez más importante  en la identidad de los individuos y las sociedades. El "opio del pueblo" (K.Marx) goza de una salud envidiable. Las religiones ofrecen seguridades y dogmas. Y precisamente vivimos tiempos líquidos (sociedad global) (Z.Bauman) que se caracterizan por perfiles borrosos e inseguros. Fragilidad en todos los ordenes de la existencia. Y frente a este panorama la alternativa religiosa es una opción.



Otra cuestión diferente es si en nuestras sociedades laicas pueden criticarse a las religiones ya sean haciendo caricaturas de Mahoma o quemando libros sagrados para aquellos que no los consideran como tales. En las sociedades democráticas debe garantizarse que las caricaturas sean defendidas de los ataques de fanáticos.  Dice poco de una religión que se siente amenazada porque se ataque a uno de sus símbolos. Siempre se puede llamar a los fieles para rezar por el alma de los insensatos que queman biblias o coranes. El problema es que esos fieles en vez de rezar pretendan acabar con la vida de aquellos que no creen. La historia de las religiones va llena de persecuciones, excomuniones y muertes de aquellos que no creen en dios.