diumenge, 6 de desembre del 2015

Kundera y la insignificancia



Reseña: Milan Kundera. “La festa de la insignificança”, ed. Labutxaca, 2015.

El texto, tiene un aire, a lo Mendoza, es decir, liviano, sin trascentalismos, con toques astracanados, a ratos, grotesco, divertidos, tiernos, dolorosos, profundos. Es decir, como la vida misma.

Amigos, que se soportan, y se cuentan cuentos para entretenerse, historias repetidas que aburren, actos cotidianos que guardan rencores y esperanzas truncadas. Alain, Ramón, D’Ardelo,Charles, Quaquelique y Calibán,  son los personajes de estas historias que Kundera explica como si lo que explicará a nuestra vecina, mientras subes en el ascensor.

¿Qué historias cuentan? En estas historias no hay épica, ni ética, ni estética. Hay un hilo histórico, que Charles, cuenta, de la época estalinista, una historia  que lleva el título de “Les vint-i-quatre perdius” (pág.29) (las veinticuatro perdices). La historia expresa la lógica del régimen estalinista que fascino a nuestros intelectuales de postguerra. Esa lógica dice que si el líder afirma cualquier cosa, por extravagante que sea, siempre será verdadera.



En ese hilo histórico, verdadero acierto de la obra, aparece otra historia que tiene que ver que la substitución del nombre de una ciudad, en la que nació uno de los filósofos más influyentes de la historia de la filosofía, Königsberg, por Kaliningrado. Kant (1724-1804) nació en esa ciudad prusiana , y los avatares históricos, acabó en manos rusas, por obra y gracia de la Segunda Guerra Mundial. ¿Quién era ese Kalinin? ¿Qué figura egregia de la época estalinista fue? La historia nos la cuenta en la página 36 y siguientes.

Sin ningún género de duda, el apartado más estremecedor es el que lleva por título “Ella mata” (pág.51). Este apartado justifica la novela. Del intento de suicidio al asesinato, es la tenue línea que separa nuestros actos

La última parte, de la obra, surgen cuestiones existenciales. Así, por ejemplo: -“Tothom xerroteja sobre els drets de l’home. ¡Quina broma! La teva existencia no està fundada en cap dret. No tan sols no et permeten de posar fi a la teva vida per la teva propia voluntad, aquests cavallers dels drets de l’home”(pàg.122) [- Todos charlotean sobre los derechos del hombre. ¿Vaya broma! Tu existencia no está fundada en ningún derecho. Ni tan siquiera te permiten poner fin a tu vida por tu propia voluntad, estos caballeros de los derechos del hombre. ]

En las últimas páginas de la obra aparece la vena filosófica de Kundera: “ La insignificança, amic meu, és l’essència de la l’existència” (pàg.135)[ Lo insigni-ficante (mediocre), amigo mío, es la esencia de la existencia”]. Kundera está en una época postheroica, que nada tiene que ver con la frase que parafrasea de J.P. Sartre.


divendres, 27 de novembre del 2015

Psicopolítica (VII)


7.- Shock

Byung-Chul Han, dialoga con el texto de Naomi Klein, “La estrategia del shock”. Afirma que estamos ante un texto en el que desarrolla una “teoría conspirativa”. En ella, aparecen dos protagonistas: El psiquiatra Ewen Cameron, alias “doctor Shock”, por su terapia, en la que se utilizaba de manera masiva e indiscriminada “fuertes electrochoques eléctricos”. La idea era, literalmente, borrar los malos pensamientos y “reescribirlos”. El contexto donde se desarrollo dicha terapia estaba inscrito en el contexto de la guerra fría. La idea que parece apuntar Klein, sería, que dicho tratamiento, podía extenderse a todos aquellos que no comulgarán con las ruedas de molino del poder establecido. 



El segundo protagonista, del libro del Klein, es Milton Friedman, el “teólogo del mercado liberal”. Klein desarrolla un paralelismo entre ambos personajes. La tesis de Klein, sería que el régimen liberal somete a la sociedad a una terapia de aceptación pasiva del modelo capitalista.

Según Han, Klein no vislumbra la nueva etapa en la que estamos instalados, la psicopolítica”. Para Han, la terapia de shock, no es propia de la psicopolítica, sino de un régimen disciplinario, propio de la etapa sólida (Z.Bauman). Lo propio del régimen disciplinario es la negatividad, mientras que la actual era, “domina la positividad”. La nota esencial del régimen actual no es dominar, sino agradar, seducir. Adiós al palo y bienvenidos a la zanahoria del “me gusta”.


diumenge, 22 de novembre del 2015

Psicopolítica (VI)



6. La curación como asesinato

El objetivo del neoliberalismo, según Byung-Chul Han, es “convertirlo -al hombre- en objeto de explotación”. Todos los obstáculos que retrasen este objetivo son objeto de medidas terapéuticas. Así, “bloqueos, debilidades y errores” deben ser eliminados en aras a “incrementar la eficiencia y el rendimiento”.

Han, afirma de forma paradójica, que el neoliberalismo introduce como estrategia de dominación, el agotamiento. Éste, no trata lo externo, sino sobre todo lo interior, la psique humana. Enfermedades de esta nueva etapa de la posmodernidad,como la depresión o el síndrome de bournout,son el nuevo tributo a pagar. Si Freud, afirmaba que la represión de los instinto se pagaba con la neurosis, ahora, en esta nueva etapa “polimorfa”, el resultado es el agotamiento psíquico.

 Resultado de imagen de síndrome de burnout

Allí donde está la enfermedad también está su curación. Ésta debe por purgar todo pensamiento negativo. Este pensamiento es el causante de las “debilidades y bloqueos”, que obstaculizan la “optimización personal”. Allí donde había pecados y remordimientos, ahora hay pensamientos negativos, que deben ser eliminados. Es necesario la exaltación de la positividad.



Han, busca apoyo, para afirmar y reivindicar la negatividad. La negatividad es el lado obscuro de la vida, sin ella, le falta nervio, viene a decir Han. Pero, en el nuevo modelo social de la etapa líquida (Z.Bauman), no hay espacio para esa negatividad. Incluso el dolor debe ser reciclado para convertirse en positividad.

Han invoca el miedo que esta industria de la conciencia – la literatura de la autoayuda, por ejemplo-, provoca en el alma humana, al desprenderse de lo negativo para exaltar únicamente lo positivo, se se expresa con un “me gusta”. De ahí que pueda acabar el capítulo afirmando: “la curación se muestra como asesinato”.

Nota:

Byung-Chul Han. Psicopolítica. Pensamiento herder. ed.Herder. Barcelona, 2014.


dilluns, 19 d’octubre del 2015

Psicopolítica (V)

5.- El dilema de Foucault

Han afirma que el propio M.Foucault después de Vigilar y castigar “se dio cuenta de que la sociedad disciplinaria no refleja exactamente su tiempo”. El propio Foucault nos lo cuenta: “ Una vez que se sepa que es ese régimen gubernamental denominado liberalismo, se podrá, me parece, captar qué es la biopolítica” (Nacimiento de la biopolítica, FCE, 2007).

Han reprocha a Foucault no haber comprendido la sociedad neoliberal. El análisis que realizó Foucault, se queda a mitad de camino. Llega a entrever la biopolítica, pero se le escapa por completo la psicopolítica.

                                            Michel Foucault

En el texto, poco amable con el lector, Homo sacer (1), G.Agamben, nos dice los siguiente: “ La muerte impidió a Foucault desarrollar todas las implicaciones del concepto de bio-política”(pág.13). Al decir de Han, las tesis de Agamben, “tampoco proporciona acceso alguno a las técnicas de poder del régimen neoliberal”. La razón por las que según Han Foucault no llega a comprender en nuevo orden social es que “vincula expresamente la biopolítica con la forma disciplinaria del capitalismo”.

Han insiste que el neoliberalismo no está interesado por “lo biológico, somático, corporal, por el contrario, descubre la psique  como fuerza productiva”. Si el orden neoliberal, trata de lo inmaterial –información, software, conocimiento- “para incrementar la productividad, no se superan resistencias corporales, sino que se optimizan procesos psíquicos y mentales”.

En esta nueva fase del capitalismo financiero-patrimonial (Piketty) el cuerpo, es liberado de la producción –al menos idealmente-, para convertirse en objeto de la estética y la sanidad. “Se pasa de la ortopedia a la estética”. Naturalmente, el análisis de Han hace hincapié en las líneas de fuerza del capitalismo corporativo. El que los trabajadores estén atados a la cadena de montaje no desmiente el análisis que lleva a cabo. Las manos de los trabajadores pierden fuerza, ante el empuje de las nuevas habilidades que se exigen en la actualidad, lo que se cuenta es el massive  knowledge (Big Data).



Los análisis de Foucault especialmente en Tecnologías del yo y otros textos afines, son según Han, insuficientes, porque “no ve ni que el régimen neoliberal de dominación acapara totalmente la tecnología del yo ni que la permanente optimización propia, en cuanto técnica del yo neoliberal, no es otra cosa que una eficiente forma de dominación y explotación”.



(1) Giorgio Agamben, Homo sacer. El poder soberano y la nuda vida. ed.Pre-textos, Valencia, 2006.

dissabte, 12 de setembre del 2015

Psicopolítica (IV)

4. Biopolítica

La biopolítica va asociada al paso del poder de muerte al poder disciplinar, a partir del siglo XVII. Volvemos a encontrarnos con M.Foucault y su obra clásica “Vigilar y castigar”. En su primera página nos describe el suplicio al que fue sometido Damiens el “2 de marzo de 1757” (pág.11) por el delito de parricidio. El delito se proyectaba contra el propio rey. Del poder soberano de muerte se desplazará al poder disciplinario que busca la “administración de los cuerpos” y la “gestión calculadora de la vida”.



El tránsito de un poder al otro es según Han producto del “cambio de la forma de producción agraria a la industrial”. Siguiendo a Foucault, dirá que “en lugar de atormentar el cuerpo, el poder disciplinario lo fija a un sistema de normas”.

A ese nuevo cuerpo al que hay que disciplinar y no atormentar, las nuevas herramientas son “código de normas, preceptos y prohibiciones”. Se trata de instaurar una ortopedia que obliga a los cuerpos a ser dóciles.

El modelo panóptico de J.Bentham aspiraba a instaurar un cuerpo disciplinado, pero jamás soñó con infiltrarse en la psique. Es precisamente este nuevo continente, la psique, la que tratará la psicopolítica.

Han sigue en este desarrollo a Foucault. Una de las aportaciones esenciales del modelo disciplinar o sociedad sólida, es el descubrimiento de la “población como una masa de producción y de reproducción que ha de administrar meticulosa-mente”. El modelo disciplinar quiere saber del individuo de la cuna a la sepultura, de la ahí, el desarrollo de disciplinas sociales como la estadística, la salud, la vida y la muerte.


Mientras el modelo de la sociedad sólida o disciplinar es insuficiente para el nuevo modelo neoliberal. Se trata a través del Big Data de penetrar no en los cuerpos, sino especialmente en la psique.


dilluns, 31 d’agost del 2015

Van Morrison 70 años



        Aniversario
    31-8-1945 
    70 años


Psicopolítica (III)


Cap.3 El topo y la serpiente

El presente capítulo trata a través de la metáfora del topo y la serpiente, el contraste entre el poder disciplinario y el neoliberalismo actual.

Empieza afirmando que “el poder disciplinario consiste en entornos e instalaciones de reclusión. La familia, la escuela, la cárcel, el cuartel, el hospital y la fábrica representan estos espacios”. M.Foucault ha sido el responsable de pensar esos espacios donde los individuos eran adiestrados para ser dóciles. La imagen que propone Han para esos entornos es el topo. La imagen del topo no es precisamente nueva. Marx, en su obra más fresca y llena de matices, como es El dieciocho Brumario de Luis Bonaparte (1), afirmará lo siguiente: (...) Y cuando la revolución haya llevado a cabo esta segunda parte de su labor preliminar, Europa se levantará y gritará jubilosa: “¡bien has hozado, viejo topo”. La expresión aparece en Hamlet, acto I, escena quinta (2). El texto habla del derrocamiento del poder ejecutivo.



Han, proyecta la figura del topo como “el animal de la sociedad disciplinaria”. Es decir, de los espacios que anteriormente había enunciado. Al decir, de Han el topo, no es adecuado para los tiempos que corren, pues, “su carácter cerrado y rígido, no es adecuado a las formas de producción inmaterial  y en red”.

Si el topo es lo obsoleto, ¿quién ocupa su lugar? Para Han, la figura de la serpiente, es la adecuada a los nuevos tiempos que corren. Si el topo es el trabajador de la era sólida, la serpiente “delimita el espacio a partir de su movimiento. La serpiente es un empresario”.


Siguiendo a G.Delueze, Han contrapone, el régimen biopolítico, propio de las sociedades disciplinares, cuya figura emblemática es el topo, y en el que se centra especialmente el cuerpo como objetivo prioritario, a las sociedades neoliberales, cuyo modelo es la psicopolítica, no le interesa tanto el cuerpo como el “alma”. Por ello, “la motivación, el proyecto, la competencia, la optimización y la iniciativa son inherentes a la técnica de dominación”. La serpiente se mueve en terreno fronterizo, no hay límites, porque no hay contextos. Cada “sujeto del rendimiento” (Han), es un empresario, que como la serpiente, busca sus objetivos al margen de los demás. Para Han, siguiendo la estela teológica afirmará que "la serpiente encarna sobre todo la culpa, las deudas que el régimen liberal establece como medios de dominación". 

Si como afirma Han, el neoliberalismo, se afianza a través de la deuda, no hay que ser un visionario para comprender la importancia que adquiere cada vez más, lo que sucede con el mercado de la deuda. Los países son hoy objeto de dominación, precisamente, a través de sus deudas. Caso paradigmático: Grecia.


Nota:

(1) K.Marx. El dieciocho Brumario de Luis Bonaparte. ed. Ariel, Barcelona, 1985,VII. pág.141-2)
(2) W.Shakespeare. Hamlet. príncipe de Dinamarca. Acto I, escena quinta, OC. Aguilar,Madrid, 1992. vol.II pág.234.


dissabte, 29 d’agost del 2015

Psicopolítica (II)

Poder inteligente (smart)

El presente apartado, trata de afirmar una idea que se nos hace difícil de aceptar. El poder no es solamente, violencia y opresión. Esta imagen debe, según Han, mucho a la imagen del la sociedad disciplinaria, que M.Foucualt, hizo de ella, especialmente, en su obra Vigilar y Castigar. Aferrarnos a ella, viene a decirnos Han, no permite comprender la mutaciones actuales, y por tanto, no podemos ni denunciar ni cambiar el nuevo modelo neoliberal.

Si en el modelo de la sociedad disciplinaria, o sólida, el poder se expresaba a través de la represión, en el nuevo modelo el “poder está precisamente allí donde no es tematizado. Cuanto mayor es el poder, más silenciosamente actúa". Han no pretende decirnos, que el poder no combine los dos modelos, dependiendo de la situación geopolítica. En las sociedades avanzadas, el modelo neoliberal está presente. Porque este nuevo poder no se opone a la libertad, al contrario, es permisivo e “incluso en su amabilidad, depone su negatividad y se ofrece como libertad". Sin embargo, esa libertad es precisamente la trampa mortal que nos ofrece el neoliberalismo.



Si en el modelo de la sociedad sólida se exigía sumisión, ahora lo que se requiere en el sociedad neoliberal es el cuidado que el poder pone para seducirnos. Lo que quiere según Han es que “los hombres se sometan por sí mismos al entramado de dominación”. Se trata de cuidarlos, seducirlo y hacerlos dependientes. En estos procesos, Han nos advierte que el ciudadano ha desaparecido en beneficio del consumidor, que se le hace creer que el auténtico soberano

"El poder inteligente lee y evalúa nuestros pensamientos conscientes e inconscientes.” Es la psicopolítica. El Big Data quiere hacernos la vida más confortable, por eso pregunta al consumidor, me gusta, para Han “el neoliberalismo es el capitalismo del me gusta”.




Como la ciudadanía ha desaparecido, de lo que se trata, por supuesto, en de generar dependencias, en el orden del consumo. La libertad es para elegir, pero no desde la autonomía personal, sino desde la dependencia de un consumidor ávido de novedades, por ello, Han nos dice: la “siguiente advertencia es inherente al capitalismo del me gusta: protégeme de lo que quiero." Esta es la expresión del dependiente –consumidor compulsivo-.

dimecres, 26 d’agost del 2015

Psicopolítica (I)

Dictadura de la transparencia

En este apartado, la palabra clave es transparencia. En la actualidad es una palabra cargada de connotaciones nobles y virtuosas, pero Han, nos advierte: "La transparencia es en realidad un dispositivo neoliberal.". Transparencia y comunicación son vasos comunicantes, se necesitan mutuamente. La comunicación rechaza: "El secreto, la extrañeza o la otredad representan obstáculos para una comunicación ilimitada. De ahí que sean desarticuladas en nombre de la transparencia.". La comunicación ha de ser total y absoluta. Si en el modelo de la sociedad sólida, tomar la palabra venía precedido por alguien que da esa palabra, ahora, la palabra se ha democratizado, todos tienen derecho a la palabra. Es más, se alienta el que todos podamos hablar. No es de extrañar, que los programas de televisión vayan llenos de espacios, donde los personajes televisivos hablen sin parar. Por supuesto, lo de menos es el mensaje.



La transparencia para Han es una trampa del modelo neoliberal. Conlleva la "conformidad total es una consecuencia adicional del dispositivo de la transparencia". Pues, " genera un efecto de conformidad como si cada uno vigilara al otro". ¿Cómo se lleva a cabo esa vigilancia? A través del Big Data (Viktor Schönberger). Éste "es un instrumento psicopolítico muy eficiente que permite adquirir un conocimiento integral de la dinámica inherente a la sociedad de la comunicación. (...)El Big Data permite hacer pronósticos sobre el comportamiento humano".

Del  panóptico de la sociedad disciplinar (M.Foucault), al Big Data, este proceso de control social es hoy, más sofisticado, del que pudo soñar G.Orwell para su distópia de 1984. El modelo de Foucault es el modelo orwelliano, pero al decir de Han, ambos han quedado obsoletos. No se trata de "Vigilar y Castigar" (M.Foucault), se trata de hacer creer que somos libres y autónomos. Por eso el Big Data, trata de explorar la psique de cada uno de nosotros. Para Han en este proceso, el Big Data transforma la persona en cosa: Mientras la persona es opaca, la cosa es transparente. Han afirma nada menos que "el Big Data anuncia el fin de la persona". F.Fukuyama, Samuel P.Huntington ya habían habla de finales, sea de la historia, o de la civilización, ahora Han quiere añadirse como lo había hecho Foucault al final de la persona.


En Big Data, se expresa amablemente a través de la red, te ofrece todo lo que deseas. Te invade ofreciéndote aquellos productos que en algún momento has mirado por las páginas de internet. Personaliza tus deseos. Te tiene controlado. Lo extraordinario de este modelo, es que el propio sujeto quien colabora en este proceso de autocontrol.


El Big Data, que es un dispositivo de dominación, " genera objetos de devoción que se introducen con el fin de someter". El smartphone (teléfono inteligente)es el instrumento, o mediador entre el consumidor, se ha borrado el ciudadano, y el Big Data. Han juega con la analogía del rosario. Según Han, " Ambos sirven para examinarse y controlarse a sí mismos". Siguiendo la analogía dirá "El me gusta es el amén digital. Cada clik nos hace más devotos.". Amén/Me gusta

dimarts, 25 d’agost del 2015

Psicopolítica (I)

La dictadura del capital

La tesis de Marx sobre la caída del capitalismo como resultado de las propias contradicciones del sistema, es decir, las fuerzas productivas y las relaciones de producción (materialismo histórico)y el advenimiento de la sociedad comunista, no se han cumplido. Para Han, "no es posible superar , esta contradicción". El capitalismo ha realizado el milagro de mutar en "neoliberalismo o capitalismo financiero".

"El neoliberalismo, como una nueva forma de mutación del capitalismo, convierte al trabajador en empresario." ¡Es el capitalismo quien lleva a cabo la desaparición de las clases! El nuevo capitalismo "elimina la clase trabajadora", convirtiéndola en empresario. Pues, "hoy cada uno es un trabajador que se explota a sí mismo en su propia empresa".

Han crítica a A.Negri y su visión idealizada de la sociedad -multitude-, pues, "ya no es posible sostener la distinción entre proletariado y burguesía". Han denuncia la ilusión que el neoliberalismo ha inoculado a la sociedad, según la cual "cada uno, en cuanto proyecto libre de sí mismo, es capaz de una autoproducción ilimitada (...). Han llega a afirmar que "todos estamos dominados por una dictadura del capital". Esta afirmación puede parecer una obviedad, si uno se ha tomado en serio lo que había dicho Marx. Para Han, Marx no puede sernos útil, en la medida que los diagnósticos se centraban en un capitalismo de producción, y hoy, ese capitalismo ha mutado en capitalismo financiero-patrimonial (T.Piketty).



Todos somos empresarios de nuestra propia vida. En el marco de este nuevo capitalismo, como en la película, el fracaso no es una opción. Así que si el individuo fracasa, se le hace responsable a él mismo, ya no valen excusas que vayan dirigidas al otro, es decir, a la sociedad. Del nosotros de la sociedad sólida (Z.Bauman) se ha pasado a su eclipse (sociedad líquida), sólo hay átomos individuales -empresarios de la propia vida-. ¿A quién se acude cuando la responsabilidad se ha centrado exclusivamente en el propio individuo? Si en la sociedad industrial (sólida) el proletariado podía canalizar su irá contra la burguesía, ahora, no hay un enemigo externo, sino interno, el propio sujeto, como dice Han, "esta autoagresividad no convierte al explotado en revolucionario, sino en depresivo".

Han denuncia que todos somos funcionarios del capital. "El capitalismo genera sus propias necesidades, que nosotros de forma errónea, percibimos como propias". El capital se ha convertido en el nuevo tótem de la sociedad postmoderna. En frase dramática Han asegura que la política "se convierte en un esclavo del capital".




¡Somos libres! Nietzsche, pensaba que para ello, deberíamos haber asumido la muerte de Dios, pero al decir de Han, hemos sustituido a Dios por el Capital. Para Han, los individuos tienen una deuda que pagar, antes con Dios ahora al parecer con el Capital. ¡Visto lo que se ha visto...!

dilluns, 24 d’agost del 2015

Psicopolítica (I)


Reseña del libro de Byung-Chul Han, Psicopolítica, ed.Herder, Barcelona, 2014.




En este blog ya me he ocupado de otro texto suyo, "La agonía del Eros". Han trata de suministrarnos armas conceptuales para luchar contra una hidra cada vez acomodada al mundo líquido (Z.Bauman) en el que estamos sumergidos.

El subtitulo del librito -no es peyorativo, simplemente obedece al formato-, nos da claves para entender de qué va la obra: Neoliberalismo y nuevas técnicas de poder. El primer capítulo, que vamos a comentar, lleva el título de "La crisis de la libertad".

Cap I: La crisis de la libertad

La explotación de la libertad

Para Han el neoliberalismo está consiguiendo hacernos creer que somos más libres que nunca. Adiós a las cadenas del mundo sólido (Z.Bauman) y bienvenidos a la idea de proyecto, pero para Han, "el propio proyecto se muestra como una figura de coacción, incluso como una forma eficiente de subjetivación y de sometimiento.".

Como vivimos en el reino del "si podemos", Han entiende que este imperativo es mucho más letal que al antiguo poder disciplinario del "deber". Así, se crea una paradoja que consiste que cuanto más libre se cree uno, más coacciones se genera en uno mismo. Para Han, esto lleva a la aparición de "enfermedades como la depresión y el síndrome de burnout son la expresión de una crisis profunda de la libertad". El síndrome de burnout, hablado en plata, consiste en que hay muchas personas que no aguantan el trato con otras personas. Este síndrome se da especialmente, en el ámbito socio-sanitario y educacional, donde la relación con el otro, se hace problemática.



Byung-Chul Han

Han explota a Hegel en su beneficio. La dialéctica amo-esclavo (Hegel) la reutiliza para afirma que el "sujeto del rendimiento" nuestro héroe postmoderno, es un "esclavo absoluto", precisamente, porqué se explota a sí mismo. No necesita de coacción externa. "El sujeto del rendimiento absolutiza la mera vida y trabaja.". En este contexto, Han nos dice la la salud se establece como un ideal de la mera vida. De ahí el arsenal para ponerse en forma. Decathlon se convierta así en una catedral del culto a la salud mediante el rodeo del deporte. Si uno echa un vistazo al personal que visita estos centros, se da cuenta que muchos no han hecho deporte en su vida. Pero la ropa es relativamente barata. Han ha afirmado que la libertad supone la idea de compartir con otros, pero nuestro nuevo héroe, es incapaz de establecer relaciones sólidas con los otros. 

Han también utiliza a Marx en su discurso, "En la libre competencia no se pone como libres a los individuos, sino que se pone como libre al capital” (K.Marx, Elementos fundamentales para la crítica de la economía política). Esta afirmación expresa la verdad del neoliberalismo. El movimiento de capitales, es el único movimiento verdadera-mente libre.