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dimarts, 5 de juny del 2018

Josep Maria Esquirol: el lenguaje de la metáfora (II)

II

Humildad

¿Quién pone esas pequeñas señales para que los caminantes no se pierdan? ¿Qué actitud debe tener? Aquí aparece la palabra humildad: Humil ve d’ humus, fang, i la idea és que és humil, que no s’enlaira. La persona humil és la que es mou en l’horitzontalitat de la terra i no creu que és en trones ideals” [Humilde viene de humus, fango, y la idea es que es humilde, que no se eleva. La persona humilde es la que se mueve en la horizontalidad de la tierra y no cree que esté en tronos imaginarios]. Horizontalidad y verticalidad son también modelos de metáforas Quien es capaz de poner esas señales es porque entiende que esa señalan hará más llevadero el camino.Se pone en el lugar de nosotros. Por eso puede decir Esquirol, “La humilitat sempre és una mirada fraternal” [La humildad siempre es una mirada fraternal]. No se mira por encima del hombro, sino a los ojos, de frente.




Mirar al otro, es condición necesaria para escuchar.”Escoltar vol dir la capacitat de rebre” [Escuchar quiere decir la capacidad de recibir]. Por eso puede afirmar que “No es pot parlar si no s’ha escoltat, aquesta és la base.”[No se puede hablar sio no se ha escuchado, está es la base]. Recibir, es que algo nos afecte. La consecuencia de esta afectación está la responsabilidad. La responsabilidad es hacerse cargo de lo que hemos oído. De responder a esa llamada que nos afecta. Por eso, Esquirol podrá decir: “L’essència de la vida humana és, segons ho veig, la capacitat de ser afectat.[La esencia de la vida humana es, según lo veo, la capacidad de ser afectado]”. Ser conmovido es esa capacidad que denominamos sensbilidad. Ser sensible es precisamente esa esencia de ser humano.

Resistencia

Los seres humanos estamos a la intemperie. Al descubierto, acechados por todos los lados, que hace que nuestras defensas se erosionen y desgasten. Estas fuerzas, nos dice, provienen de la propia naturaleza, pero también de la sociedad que nos toca vivir. Es aquí donde la metáfora/concepto resistencia tiene su ubicación. “Resistència ho faig servir com a sinònim de protecció, empara, recer, aixopluc davant les forces disgregadores.”[Resistencia lo hago servir como sinónimo de protección, amparo, cobijo, refugio delante de fuerzas disgregadoras].




Resistencia tiene que ver con la vulnerabilidad. Nuestras vidas se mueven entre la alegría y la tristeza. La vida nos puede hacer daño. Nos afecta porque somos sensibles, porque somos vulnerables. Por eso buscamos protección.

Misterio y grieta

El misterio lo contrapone a la pretención cientificista de querer explicarlo todo. “Quan tu expliques una cosa, el que significa és que explicites el que hi ha a dintre cap a fora”[Cuando tu explicas una cosa, lo que significa es que explicitas lo que hay de dentro hacia afuera]. Esquirol reivindica ese espacio en el que no se puede explicar. “D’això tradicionalment se n’ha dit misteri.” [De esto tradicionalente se ha dicho misterio].

El misterio nos lleva hacia un más allá, que no necesariamente ha de ser trascendental, pero que según Esquirol quiere decir: “que l’experiència que fem de la vida les persones concretes fa que d’alguna manera notem alguna cosa que no és explicable.”[la experiencia que hacemos de la vida de las personas concretas hace que de alguna manera notemos alguna cosa que no es explicable].  Lo que somos nos lleva a la idea de posibilidad y de ahí a otra metáfora. En eso que somos se esconden grietas [escletxes] que nos indican la condición humana, una “fondaria inabastable” [un fondo inabastable]. Somos porosos, nuestra experiencia cotidiana deja sécuelas que se fitran dentro de nosotros.




Lo que somos, nos abre hacia los demás y viceversa. Los términos de esa relación pueden ser: “La bondat i l’amor són expressions de la mateixa cosa”[La bondad y el amor son expresiones de la misma cosa]. Estos términos están como posibilidad en esa brecha que somos como misterio. Como esos excursionistas que siguen un camino discreto y que se afianza con los hitos que otros han puesto para hacer el trayecto más fácil. Dar y recibir expresa eso que podemos ser. Nadie pone el nombre en los hitos, lo hace como reconocimiento a los demás y cuando nosotros pasamos por ellos recibimos un don anónimo de alguien que desconocemos pero que ha estado ahí, en el mismo lugar en el que ahora nosotros estamos.