dijous, 17 de setembre del 2020

La democracia sonríe en el Oriente Medio

EE.UU ha logrado una foto para impulsar la carrera de Trump. En la foto aparecen los Emiratos Árabes y Bahrein, Israel y el anfitrión, EE.UU.  Propaganda para políticos en apuros, Trump y Benjamín Netanyahu, acosados en sus respectivos países. Los otros signatarios son los ministros de Exteriores, el jeque Abdulá bin Zayed bin Sultan Al Nahyan y el jeque Jalid Bin Ahmed Al Jalifa, respectivamente. 

 


La normalización de relaciones entre Israel y EA y Bahrein, es simplemente testimonial. La ocupación israelí de los territorios palestinos se mantiene con mano de acero, ante la clásica pasividad de la Comunidad internacional. Todos los presentes se deshacen en elogios y aspiran al premio Nobel de la paz, pero lo cierto, es que  Netanyahu tendría que se llevado al TIP de la Haya por crímenes de guerra. Pero eso  no pasará. Lo avala el amigo americano –sea cual sea el gobernante de turno-. 

¿Este acuerdo sirve de algo para resolver el conflicto palestino? La respuesta es un rotundo NO. Israel tiene “confinados” a los habitantes de la Franja de Gaza y Cisjordania, en un estado permanentemente de terror. ¿Cuál es el secreto para poder llevar acabo semejante política del terror? Afirmar a coro que todos los palestinos son terroristas. Con esta afirmación, la Comunidad Internacional, se muestra comprensiva con el Estado de Israel y su socio protector EEUU.

Los palestinos son los parias malévolos, mientras que los judíos son los buenos. En un mundo atroz como este, sólo la propaganda de los Estados es capaz de hacer callar a una población aterrorizada que vive permanentemente con la espada de Damocles encima, en medio de un silencio cómplice que se oye más allá de Plutón.


Cap comentari:

Publica un comentari a l'entrada